Margaritas

Hace mucho frío y los días se ponen grises.
El viento se lleva las hojas del calendario con la ligereza de una mariposa.
Me hace daño leer tanto libro cursi, me pone cursi, me siento cursi, soy cursi.

Estoy eternamente enamorada de algo/alguien/un lugar que no existe mas que en mis suspiros.
Saudade lo llaman los portugueses.
Tonterias lo llama mi madre.
Angustia lo llama mi psiquiatra.
Soledad le llamo yo.

Si tuviera un ramo de margaritas ( mis flores favoritas) las desmenuzaria hasta reducirlas a nada, para ahorrarles la verguenza de verse marchitas y olvidadas en algun basurero.

Podria decirte que soy una margarita, pero no lo soy, soy una Monica.

Y Monica quería alguien que le comprara margaritas en su cumpleaños, que le leyera un libro antes de dormirse - preferentemente el libro que Monica le regalo un día, solamente porque sí- Monica quería conocerlo cuando duerme, cuando sueña, cuando está de prisas, cuando está cansado y cuando tiene gripa.

Pero el se fué.

Monica se quedo con las margaritas.
Y un nudo en la garganta.